Por Lito Santana
¿Has oído decir aquella frase de nuestra gente en el campo, cuando le preguntas dónde queda tal o cual lugar? “Eso está ahí mismo”, te responden. Lo dicen como forma de no desalentarte.
Pues acabo de vivir esa experiencia, no de una señora del campo, sino de un joven motoconcho en la ciudad de Baní.
Me habían hablado de visitar el “Salto Las Yayitas”, cercano a la comunidad que lleva ese mismo nombre en las montañas al norte de Baní.
Guiado por un buen maestro, que me explicó que la carretera hacia la comunidad Las Yayitas, arranca prácticamente llegando a Baní, si está en ruta desde la ciudad Capital, arranqué para allá.
“Sólo tiene que girar a la derecha en la callecita pegada a la pared del cuartel o fortaleza de la Policía Nacional, que colinda con el puente viejo sobre el río Baní”, me informó.
En ese lugar fue que le pregunté al hombre del motor cuando me dijo: “eso está ahí mismo”. Y no era falsa la información, pero debí recorrer cerca de 23 kilómetros en ruta ascendente, todo el tiempo, y llegar a Las Yayitas.
De ahí seguir para el salto es más cerca, aunque tienen que llevar ropas adecuadas y buenos tenis o botas para una parte del camino y luego penetrar hacia el bosque y llegar a la meta.
Te lo describo de esta manera, porque será un esfuerzo que valdrá la pena.
Vislumbrar este regalo de la naturaleza es algo excepcional.
Se trata de una caída de agua sobre el río Baní, que puede alcanzar hasta 12 metros de altura, pero por la procedencia de este líquido tu quedarás maravillado.
Influenciado por un clima agradable, no importa la época del año, este paradisíaco lugar tiene sus encantos a base de aguas cristalinas, temperaturas frescas, tranquilidad medio ambiental y no se queda atrás las riquezas de su flora y fauna.
En el trayecto, y al estar en el sitio, podrás distinguir una vegetación totalmente tropical, con enormes matas de caoba, capá, javilla, pino, ceiba, entre otras variedades.
Y su fauna, hospedera de aves como el pájaro bobo, la cigua palmera, ruiseñor y pájaro carpintero, te hará vivir un ambiente de libertad inigualable.
Siendo el municipio de Baní uno de los mejores atractivos de la región, no puedes ignorar que Las Yayitas es una extensión de ese territorio y que no tienes que cargar con comidas de la casa o la carretera, que por cierto tiene muy buenos paradores, porque en Las Yayitas, te agradecerán que consumas lo que se produce ahí: buenísimas comidas criollas con sazones exclusivos de la zona.
Buscando el desarrollo de la comunidad encontrarás lugares para adquirir variedades de platos a base de carnes de chivos, cerdos, pollos y pescados, acompañados de moros de guandules, yucas hervidas o plátanos fritos.
Ven al Salto Las Yayitas y tendrás un recuerdo inolvidable.
