Del caos del tránsito en Santo Domingo se viene hablando de forma vehemente en los últimos 15 años. Por citar algunos ejemplos: Diez intersecciones crean caos en avenida Abraham Lincoln (Diario Libre 2009); Proponen prohibir camiones Malecón (Diario Libre 2010) El desorden en las calles de Santo Domingo (El Dinero 2009). Y, sin embargo, estas advertencias no sirvieron para evitar el caos que en estos momentos se sufre en Santo Domingo.

Diciembre de 2023 ha sido particularmente caótico. Las quejas vienen de todos los sectores y medios impresos como el Listín Diario, han convocado a una “mesa de movilidad” para ver qué soluciones se puede encontrar a la crisis.

Las quejas de los ciudadanos vienen por todas partes: excesos e imprudencias de los conductores; patanistas que no respetan los límites horarios impuestos por el Intrant; semáforos apagados; muchas calles en mal estado; un parque vehicular de más de tres millones de motociclistas que circulan por las vías medalaganariamente, y, por supuesto, 1.6 millones de vehículos privados entre yipetas y carros. Y a todo esto: un incremento de vehículos en las calles impulsado por la economía navideña.

Una ciudad muy poblada por vehículos

El discurso aquel de “las horas pico del tapón” en Santo Domingo ha pasado a ser a la inversa: ¿cuáles son las horas en las que el tránsito no es pesado? ¿las hay? 

Vivir en el Gran Santo Domingo o trasladarse dentro de Santo Domingo es indescriptible. De acuerdo con el X Censo 2022, la población dominicana es de 10,760,028 habitantes, de los que 3,798,699, alrededor de 35.29%, viven en ese territorio.

Las estadísticas de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) son aún más preocupantes. De los 5,463,996 unidades de vehículos que había en el país hasta el año 2022, el 30.6% se encuentra en el Distrito Nacional y el 20.6% en la provincia Santo Domingo. Quiere decir que 51.2% de todas esas máquinas están en la capital. Esto es unos 2,794,077 vehículos de motor, entre motocicletas los que destacan 849,874 motocicletas; 292,768 yipetas y 244,734 vehículos de carga, además en menor medida, autobuses, automóviles máquinas pesadas y camiones de volteo.

Dicho de otra forma, por cada 10 personas en el Gran Santo Domingo hay siete vehículos.

Parque vehicular de la República Dominicana

Estadísticas de la DGII

Una noche cualquiera

A las ocho de la noche del pasado lunes 18 de diciembre de 2023 la velocidad de tránsito por la avenida Máximo Gómez era de un kilómetro por hora próximo a sectores como Villas Agrícolas y La Zurza.

Mientras que en la avenida John F. Kennedy, entre las vías Dr. Defilló y la Winston Churchill la velocidad era de 9 kilómetros por hora. En Piantini el tránsito se hacía más pesado, a 4 kilómetros por hora en la Andrés Julio Aybar.

En Santo Domingo Este el tránsito por la autopista Las Américas, desde la cabeza del puente Juan Bosch hasta el monumento a Juan Pablo Duarte, a las siete de la noche, la velocidad de traslado promedio era de 4 kilómetros por hora. Y en Los Mina, sobre el puente Gregorio Luperón, que conecta Santo Domingo Norte con Santo Domingo Este, bajaba a 1 kilómetro por hora.

Estos datos, según la aplicación de tránsito Waze.

Ocupar dos horas al día para llegar al trabajo, una hora de ida y una hora de vuelta, significan a la semana diez horas, que extrapolándolo al año es casi el mismo tiempo que una persona invierte en sus vacaciones cada año, 18 días. 

¿Quién controla el tránsito?

La ley 63-17 sobre tránsito y movilidad urbana otorga a la Dirección General de Seguridad y Tránsito Terrestre (Digesett) la función de laborar las actas de infracciones a las disposiciones de esa ley y por la ocurrencia de accidentes de tránsito; también fiscalizar y controlar la movilidad de personas y mercancías, el transporte terrestre de pasajeros y cargas, el tránsito y la seguridad vial y ejecutar los operativos en las vías públicas derivados de los cambios en el sentido de circulación y otras intervenciones, en coordinación con los ayuntamientos correspondientes, conforme al procedimiento reglamentario.

El recurso humano y el caos

Ante un universo de más de cinco millones de vehículos a nivel nacional, y que en el último año sumó 311 mil vehículos nuevos, se espera que la fuerza que enfrente los tapones y ponga las multas en el país se fortalezca al mismo nivel. Pues no. 

Datos proporcionados por la Digesett indican que al 7 de diciembre de 2023 en la nómina de la institución había un total de 3,331 empleados entre personal civil y militar de los cuales 1,888 estaban instalados en el Gran Santo Domingo.

De los que están asignados al Gran Santo Domingo unos 1,262 están en el Distrito Nacional; 274 en Santo Domingo Este; 177 en Santo Domingo Oeste y 175 en Santo Domingo Norte.

En tanto que 1,126 se distribuyen en el resto del país. 234 están asignados a Santiago, 160 a San Pedro de Macorís, 92 a La Altagracia, 128 a Baní y 123 a San Francisco de Macorís.

De acuerdo con la información suministrada por el director de Recursos Humanos de la Digesett, teniente coronel Francisco Figuereo Pérez, este personal trabaja en tres turnos, matutino, vespertino y nocturno, en función de las necesidades.

Sin embargo, con solo viajar por las calles de Santo Domingo después de las 6:00 pm es evidente que los agentes de la Digesett no son visibles.

Al margen de los datos proporcionados por la dirección de Recursos Humanos de la Digesett, Pronosticamedia.com revisó la nómina de la Digesett entre octubre de 2023, la última fecha de este año publicada en la página web de la entidad, y octubre de 2022, y se constató una reducción en la nómina, específicamente, en la parte más neurálgica: los agentes fiscalizadores, que son quienes imponen las multas y que a la vez son miembros de la Policía Nacional.

En octubre de 2022, los agentes fiscalizadores de la Digesett eran 2,268, según datos propios de la entidad. Sin embargo, un año después en octubre de 2023, los fiscalizadores son 1,978, es decir, 290 fiscalizadores menos. Una reducción de un 13% de un año al siguiente, superior a todo el personal de la segunda regional con más agentes, Santo Domingo Este (274).

No es el único problema

No sugerimos que la disminución de agentes en las calles sea la causa única del caos en el tránsito, sino un elemento que puede agravar la insoportable realidad de trasladarse de un sitio a otro en el Gran Santo Domingo.