Por Nelson Cuevas Medina
Este escrito explora la importancia crítica del lenguaje jurídico claro y preciso en la interpretación y aplicación del Derecho Civil en República Dominicana.
Los abogados deben desarrollar habilidades en el conocimiento y uso del lenguaje jurídico para evitar confusiones y malentendidos.
El lenguaje jurídico es esencial para la interpretación y aplicación de las normas jurídicas. La claridad y precisión en la redacción de los textos legales son fundamentales para prevenir errores que podrían afectar la correcta aplicación de la ley.
Asimismo, la coherencia y claridad en el lenguaje jurídico son cruciales para la eficacia y comprensión de documentos y sentencias dentro del ámbito judicial.
Rudolf von Jhering, jurista alemán, define el lenguaje jurídico como "el arte de expresar de manera clara y concisa las ideas jurídicas, de manera que sean comprensibles para todos los que participan en el proceso judicial".
Esta definición subraya la importancia de evitar ambigüedades y oscuridades en la redacción legal, las cuales pueden conducir a interpretaciones erróneas y afectar negativamente la justicia.
Clarence Morris, sostiene que, "el lenguaje es fundamental para comprender cómo los abogados piensan y razonan en su trabajo". Destaca que la solución de problemas jurídicos involucra aspectos prácticos y teóricos, enfatizando la necesidad de una educación jurídica que se enfoque, tanto en la teoría del derecho como en su aplicación práctica.
En República Dominicana, el Derecho Civil es una de las ramas más importantes del ordenamiento jurídico. En este contexto, el lenguaje desempeña un papel crucial en la interpretación y aplicación de las normas legales.
Los abogados que practican en este campo deben ser conscientes de la importancia del lenguaje en su trabajo y desarrollar competencias sólidas en el uso del lenguaje jurídico.
Esto no solo les ayuda a evitar malentendidos y errores en la interpretación y aplicación de la ley, sino que también les permite invocar adecuadamente los recursos pertinentes frente a las sentencias judiciales.
*El autor es licenciado en derecho, con maestría en Derecho Civil y Procedimientos Civiles.