Antonio Isa Conde
Inés Aizpún señalaba en su columna AM del Diario Libre, del viernes 21 de junio, que "una clase media fuerte y mayoritaria es la mejor garantía para la paz social y el desarrollo de un país ".
Nadie discutiría eso.
Dentro de la clase media existen diferentes estratos, dependiendo del poder adquisitivo.
Unos son más vulnerables que otros, pero todos viven en la cuerda floja de la inseguridad.
Proteger y fomentar el desarrollo de la clase media, no solo como garantía de la paz social, como bien señala Inés Aizpún en su AM, sino porque haciéndolo protegemos e impulsamos nuestro mercado interno, contribuyendo a cerrar la brecha de la desigualdad.
El centro de las políticas públicas debe ser la gente.
Las reformas deben beneficiar, no castigar a la clase media, como ha sido la tradición.
De ahí la incapacidad de convertir nuestro crecimiento en desarrollo y sostenerlo.
Pensemos en el futuro.
La politiquería y la insensatez no deben corromper el tan necesario proceso de reformas.