Por Osvaldo Santana
Los acontecimientos vienen sugiriendo, por no decir confirmando, la percepción de que el gobierno estaría interesado en propiciar algunos ajustes fiscales con el fin de que los mismos sean el resultado de “consultas” con actores clave de la sociedad.
Hace dos semanas, desde pronósticamedia.com se planteó que el presidente Luis Abinader postergó “cualquier iniciativa tras el fracaso de la reforma fiscal, con el discreto propósito de propiciar que la misma fuese un producto impulsado desde la sociedad”.
Los recientes encuentros del ministro de Finanzas, Economía, Planificación y Desarrollo Magín Díaz con líderes del sector económico parecerían el inicio de una gestión en ese sentido.
Desde el pasado 5 de agosto, Díaz “privilegió” a los más pequeños, para intercambiar ideas sobre la necesidad de impulsar la economía y propiciar los cambios en esa dirección. Se hizo acompañar del ministro de Industria y Comercio y Mipymes, Víctor -Ito- Bisonó, con quien realizó el primer encuentro con representantes del sector Mipymes a nivel nacional, “como parte del compromiso del Gobierno con el diálogo permanente y el fortalecimiento del aparato productivo del país”.
“Con esta reunión, ambos funcionarios buscan seguir promoviendo un entorno favorable para el crecimiento y la consolidación de las micro, pequeñas y medianas empresas, reconociendo su papel fundamental en la dinamización de la economía nacional y en la generación de empleos,” expresa una declaración despachada desde la presidencia de la República.
La reunión se efectuó en el Ministerio de Industria, y allí la concentración del discurso fue en “propuestas y preocupaciones del sector sobre temas clave para su desarrollo, reiterando la voluntad del Gobierno de seguir articulando esfuerzos que faciliten el acceso a financiamiento, mejoren las condiciones para operar y fortalezcan la capacidad productiva de las Mipymes, que representan el 89.5 % del tejido productivo nacional”.
“Estoy convencido de que podemos desarrollar iniciativas concretas de política pública que fortalezcan y complementen los esfuerzos que ustedes ya vienen realizando. Desde hoy, reitero mi disposición de colaboración y dejo formalmente abierto este canal de trabajo conjunto”, expresó el ministro Díaz.
El ministro Ito Bisonó aseguró que este tipo de espacios reafirman la visión del gobierno de trabajar mano a mano con los sectores productivos nacionales. “Las mipymes son el corazón de la economía dominicana. Desde el Gobierno estamos comprometidos con fomentarlas y garantizar que cuenten con el apoyo necesario para superar retos, crecer y generar empleo en todo el país”, expresó.
Ambos funcionarios se comprometieron a mantener un canal de comunicación directo con los actores de este sector y con otros componentes clave del aparato productivo nacional, “como parte de una estrategia integral de desarrollo económico con visión territorial e inclusiva”.
Los representantes de las Mipymes valoraron la apertura y el acercamiento mostrado por el Gobierno y aprovecharon el encuentro para manifestar sus principales necesidades y desafíos, reafirmando su disposición de seguir colaborando en la construcción de soluciones conjuntas.
Según la información oficial, ahí no se habló de ajustes, pero cualquier observador puede percibir la apertura a una relación constructiva en la búsqueda de un propósito.
Luego se produjo la reunión con otros actores de un nivel importante del aparato económico, representados en la Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC), donde se reafirmó “el compromiso con una gestión abierta y basada en el diálogo permanente con los sectores productivos”.
En la reunión, “se abordaron temas clave para el fortalecimiento del sistema fiscal y financiero del país, así como las principales necesidades del sector”. Ya en este escenario, en el cual también concurrió el ministro de Industria, Comercio y Mipymes, el tema fiscal fue registrado en la información oficial.
“El ministro agradeció el apoyo recibido y compartió con los empresarios las prioridades y perspectivas de su gestión, destacando que estará enfocada en la escucha activa, la búsqueda de consensos y la articulación de políticas públicas que promuevan el crecimiento económico con responsabilidad fiscal.
“Estos espacios de conversación son esenciales. Queremos trabajar de la mano con todos los sectores que generan valor a la economía. El diálogo será la base para construir una política fiscal moderna, eficiente y sostenible”, afirmó Díaz, según la información oficial.
La ONEC agrupa a importantes empresas del sector comercial de venta al detalle, como supermercados, hipermercados, farmacias, tiendas por departamentos y especializadas, ferreterías, centros comerciales y otros negocios a nivel nacional.
La más reciente reunión del ministro de Hacienda y Economía se efectuó el pasado jueves 7 de agosto con un importante grupo de “destacados líderes del empresariado nacional, con el objetivo de promover el diálogo sobre temas fiscales y financieros del Estado”, según informó la Presidencia.
La reunión, celebrada en el Salón Matías Ramón Mella del Ministerio de Hacienda y Economía. El ministro Díaz “escuchó las perspectivas y propuestas de los empresarios sobre temas clave para el fortalecimiento de la economía, reafirmando su compromiso de mantener una gestión cercana, transparente y orientada al consenso.
“Estamos comprometidos con mantener un diálogo abierto y constructivo con el sector empresarial, porque solo trabajando juntos podremos seguir fortaleciendo la confianza, la estabilidad económica y el desarrollo sostenible del país”, afirmó el ministro.
Dijo que el “espacio de diálogo refleja la importancia de la colaboración público-privada para continuar impulsando la estabilidad macroeconómica, la competitividad del país y el bienestar de todos los dominicanos”.
“Los líderes empresariales”, según la nota oficial, “valoraron la apertura y transparencia mostrada por el titular de Hacienda y economía, Magín Díaz, y expresaron su disposición de colaborar con las autoridades en la identificación de medidas que contribuyan a fortalecer las finanzas públicas y promuevan el desarrollo sostenible de la República Dominicana”.
Entre los asistentes, la información señala que se encontraron Ligia Bonetti, presidenta ejecutiva del Grupo SID; Samir Rizek, presidente de GME y de la Asamblea de Accionistas de Alpha Inversiones; Manuel Corripio, presidente del Grupo Corripio, y Manuel Estrella, presidente del Grupo Estrella.
Asimismo, Luis Molina Achécar, presidente del Consejo del Banco BHD; José Miguel González Cuadra, presidente ejecutivo de CCN; Francesca Rainieri, presidenta de AMCHAMDR y ejecutiva del Grupo Puntacana; Paola Rainieri, vicepresidente de Marketing, Relaciones Públicas y Comunicaciones del Grupo Puntacana; Félix García, presidente del Grupo Linda, y René Grullón, presidente ejecutivo del Grupo Popular.
La intención es más que manifiesta
"Queremos trabajar de la mano con todos los sectores que generan valor a la economía. El diálogo será la base para construir una política fiscal moderna, eficiente y sostenible", dijo Díaz en uno de los encuentros, lo que sugiere que la intención es más que manifiesta.
El presidente Abinader ha mantenido una postura distante del tema fiscal, y días después de la designación de Díaz en Hacienda, cuando fue abordado por los periodistas, en el sentido de que si se había reunido con él, se limitó a decir: "Todavía no hemos hablado con Magín. Tiene dos semanas y está trabajando y eso no se ha discutido”.
Pero recientes declaraciones de Abinader sobre el estado de las finanzas públicas y especialmente la caída del crecimiento económico, parecerían reconocer la necesidad de aumentar las recaudaciones fiscales.
Fue en esa perspectiva que se consideró que la designación de Magín estaría encaminada a lograr el propósito de aumentar la recaudaciones. Había sido uno de los más agudos observadores acerca de la necesidad de aumentar las recaudaciones, y era ajeno a la actual Administración, y había sido el recaudador del gobierno anterior.
Magín encaja en la idea de una reforma desde la sociedad
Magín encaja perfectamente en la jugada orientada a conseguir que cualquier proyecto asociado a la idea de la reforma fiscal llegue “desde fuera” del gobierno, que, desde octubre del año pasado, ya había descartado la tan repudiada reforma fiscal elaborada por el ministerio de Jochi Vicente, a quien sustituyó Díaz.
El 19 de octubre del año pasado, Abinader se dirigió al país para anunciar el retiro inmediato del proyecto de Ley de Modernización Fiscal del Congreso Nacional, persuadido de que el mismo había sido rechazado por la mayoría de los ciudadanos.
Magín y los sectores sociales
El ministro de Hacienda llega al cargo con el impulso de un poderoso sector empresarial de la región Norte. Fue llamativo que quien lo juramentó fue la vicepresidenta Raquel Peña, de esa región y también aupada por el mismo sector.
Si bien el ministro Díaz ha logrado las ideales conexiones con los más importantes sectores económicos, la pregunta inevitable es cómo lidiará para presentar cualquier iniciativa a los sectores sociales que pudieran ser impactados con la misma.
¿Qué puentes construirá para seguir avanzando en la dirección deseada para propiciar una reforma fiscal o cualquier cambio en la política recaudatoria del gobierno?
Mientras Abinader luce distante de tales gestiones, y ni hablar de su Partido Revolucionario Moderno (PRM), habría que ver cómo el ministro de Hacienda construiría una narrativa convincente acerca de cualquier propuesta al resto de la nación, es decir, más allá de las fuerzas económicas y productivas.
O habría que pensar que los “sacrificios” se afirmarían en los sectores con más posibilidades de hacer concesiones, como sería el desmonte de subsidios y transferencias que reciben del sector público.
Lo que parece innegable es que en la carrera hacia la construcción del Presupuesto para 2026, el ministro de Hacienda trata de construir consensos en la dirección orientada para aumentar los ingresos para la Administración.