Por Osvaldo Santana
Muchísimas cosas se dicen y publican en los medios de comunicación acerca del pasado, incluso, sobre el pasado reciente. Pero a veces se pretende transformar la historia, y se cuenta, sin presentar todo el contexto en que ocurrieron.
Yo he sido remiso a abordar la historia más reciente relacionada con mi persona, y lo he obviado expresamente. Pero hay asuntos que requieren precisiones.
En un lugar perdido de la página digital de Listín Diario del 15 de mayo se rememoran los hechos sobre el 15 de mayo de 2003, cuando autoridades del ministerio público y policiales durante el gobierno de Hipólito Mejía ocuparon el grupo de empresas constituido por el Listín, Ultima Hora, el Expreso y el Financiero.
No me referiré a todo lo ocurrido, sino específicamente a la decisión de renunciar de los directores de esos medios: Miguel Franjul, Osvaldo Santana, Rudy González, Virgilio Alcántara; Frank Marino Hernández y Nelson Rodríguez, estos dos últimos subdirectores de El Financiero y Ultima Hora, respectivamente. La realidad es que fue una decisión colectiva.
Me enteré de que el director del Listín Diario, colega Miguel Franjul, se preparaba para abandonar la empresa. Última Hora estaba en proceso de cierre de la edición, y se constituía en una oportunidad para decirle al país por qué abandonaríamos las empresas ocupadas.
Y en efecto, tuve la iniciativa de convocar a los demás compañeros a un encuentro en Última Hora, en la oficina del director. Y planteé que no era adecuado “renunciar”, irse por ahí cada uno, por su lado, que el país se merecía una explicación.
Como la edición de Ultima Hora estaba en proceso, la misma recoge ese momento a la perfección, con una portada que denunciaba la intervención.
No nos fuimos en solidaridad con ninguno de los directores, como se ha dicho una y otra vez. Fue un acto de respuesta moral y política, propia de profesionales de la comunicación.
Hicimos el documento, que solo recibió una enmienda, en atención a una sugerencia de Franjul, para denunciar el atropello que habían sufrido Ramón Báez Figueroa y Ramón Báez Romano con la ocupación de los medios de parte del gobierno de Mejía. Los directores decidieron que fuese, precisamente yo, quien leyera el comunicado ante los medios de comunicación.
Lo importante, sin embargo, era que quedaran consignadas colectivamente las razones de nuestra salida de las empresas bajo la sombrilla del Grupo Listín Diario, intervenidas por el gobierno.
A continuación, el comunicado de entonces:
Declaración pública de los directores de Listín Diario, El Financiero, Ultima Hora y El Expreso:
Ante el hecho insólito, verdaderamente ominoso, perpetrado por el Gobierno Nacional, de tomar por vía de la Fiscalía del Distrito Nacional, las instalaciones del Grupo Listín, los directores abajo firmantes declaran al pueblo dominicano y al mundo, que ante la ocupación de que han sido objeto los periódicos Listín Diario, El Financiero, Ultima Hora y El Expreso:
Entendemos que, ante una situación como ésta, resulta imposible ejercer el periodismo en condiciones mínimas, en un ambiente de libertad donde se puedan divulgar las opiniones y las informaciones acerca del acontecer nacional e internacional.
De hecho, estos medios de comunicación han quedado en un virtual estado de secuestro, con la intervención del Gobierno, en representación del Banco Central, de un “Administrador Designado”, que ya ha comunicado algunas medidas que obviamente vulneran el clima de libertad en que debe producirse el proceso comunicativo.
Deploramos todos estos hechos, y entendemos que los mismos están motorizados en la gestión del gobierno nacional, a la sazón presidido por el señor Hipólito Mejía. En efecto, durante las horas de la mañana, la administración del gobierno envió al consultor jurídico del Poder Ejecutivo, licenciado Guido Gómez Mazara, quien se reunió con el presidente ejecutivo de la Editora Listín Diario, don Ramón Báez Romano, e inmediatamente después se presentaron dos ayudantes fiscales y el administrador designado, generando un clima de desasosiego generalizado en las instalaciones.
Consideramos que la libertad de expresión ha sido vulnerada, que lo ocurrido en esta empresa deberá tener repercusiones gravísimas en el país. Que quienes hoy silencian la gravedad de estos acontecimientos, probablemente lamentarán lo que han aceptado como un simple proceso judicial que encubre una acción que obedece a un claro plan político.
Nadie extraña en este país que los medios de comunicación han estado sometidos a un temperamento autoritario, a veces opresivo, que ha llevado a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y al Departamento de Estado del gobierno norteamericano a denunciar la figura de la autocensura en la prensa nacional.
Ante esta situación, anunciamos a la nación dominicana y al mundo la imposibilidad de continuar ejerciendo la dirección de los medios de comunicación Listín Diario, El Financiero, Ultima Hora y El Expreso.
Ningún periodista que aprecie con seriedad y con alto sentido ético el alcance de su misión estaría en condiciones de someterse a las nuevas reglas que el gobierno impondrá desde ahora en adelante.
Y mucho menos nosotros que merecimos la confianza y el respeto del presidente del Consejo de directores y del presidente ejecutivo de la Editora Listín Diario, C. por A., señores Ramón Báez Figueroa y Ramón Báez Romano, respectivamente, cuya honra e intereses han sido profundamente lastimados con esta burda ocupación de estos diarios.
No hay condiciones, por tanto, para el desempeño del periodismo en estas empresas, y, en consecuencia, dimitimos a nuestras funciones, desde el mismo día de hoy.
Miguel Franjul, Listín Diario:
Ruddy González, El Expreso;
Osvaldo Santana, Ultima Hora;
Virgilio Alcántara, El Financiero;
Frank Marino Hernández, director ejecutivo El Financiero;
Nelson Rodríguez, subdirector Ultima Hora.
Santo Domingo, D. N.
15 de mayo, 2003.
Nota: No firmaron este documento en el momento, pero igual renunciaron Lito Santana, Fabio Cabral y Ramón Jerez.
