Por Evelyn Irizarri Santos
NUEVA YORK, Estados Unidos. – Tan pronto se convirtió en la candidata a la Presidencia, Kamala Harris, aceleró el entusiasmo a lo interno de su partido y consiguió la aprobación de algunos independientes que hoy aseguran que darán su voto a la demócrata en las elecciones del próximo mes de noviembre.
Desde el principio
En los primeros días de campaña, las primeras mediciones entre Harris y Trump mostraban una ventaja de un punto porcentual a favor de la demócrata. Una ventaja que se ha ido ampliando conforme pasan los días. Todo esto parece no perturbar al candidato republicano y su campaña, quienes siempre tratan de minimizar los avances de Harris y el notable crecimiento de su candidatura.
¿Por qué ella y no Trump?
Fuera de las filas demócrata y republicana, donde por razones obvias, los seguidores votarán por su partido, aquellas personas que no se encuentran afiliadas a ninguna organización partidista y que han manifestado su decisión de sufragar a favor de la demócrata, explican que prefieren hacerlo por ella en vez del expresidente Donald Trump, porque Harris es más joven, con ideas más afines a los tiempos modernos, por su apoyo y posición en temas tan relevantes como el aborto, la defensa a las mujeres, sus propuestas sobre el control de armas y su respaldo a las minorías y la comunidad LGBTQ.
En cambio, aseguran que no darían su respaldo a Trump, entre otras razones, por su postura antiinmigrantes, sus planteamientos sobre el aborto y su oposición al control de armas.
Carrera judicial
Desde el año 1990, Kamala Harris inicio su carrera en el terreno judicial. Fue designada como fiscal adjunta del Distrito en el condado de Alameda, en California. Cuatro años más tarde, fue asignada a la Junta de Apelaciones del Seguro de Desempleo del Estado, también formó parte de la Comisión de Asistencia Médica de California. En 1998 se trasladó a San Francisco, donde se desempeñó como asistente de Fiscal de Distrito. Dirigió la División de Servicios para la Familia y los niños. En el año 2002 se postuló y ganó como Fiscal del Distrito en San Francisco. Repitió en 2007. Los logros más significativos de su gestión como fiscal, los alcanzó durante el período 2011 a 2017, como Fiscal General de California. Una época fructífera que, sin dudas, parece haber allanado el camino hacia el Congreso de los Estados Unidos.
En el Congreso
En febrero de 2016, Kamala Harris ganó la candidatura dentro de su partido para alcanzar un escaño en el Senado de los Estados Unidos, con una victoria indiscutible, con un 78 por ciento.
En noviembre de ese año, Harris ganó la senaduría por California, mientras que Trump ganaba la Presidencia, dando inicio una batalla constante entre la senadora que se oponía de manera feroz a las órdenes ejecutivas del presidente republicano. Harris fue una opositora tajante a la controversial Orden Ejecutiva 13769, mediante la cual se prohibía el ingreso a los Estados Unidos a ciudadanos de algunos países de mayoría musulmana y a toda medida con matices discriminatorios.
La vicepresidenta
En enero de 2019, Kamala Harris anunció sus intenciones de competir por la candidatura presidencial. Su precandidatura fue muy bien acogida y recibió una cifra récord de donaciones 24 horas después de su anuncio.
Sin embargo, tras el segundo debate, sus números cayeron de forma drástica. Finalmente, retiró sus aspiraciones el 3 de diciembre de 2019. En marzo del 2020 apoyó a Joe Biden, quien ganó la nominación presidencial del Partido Demócrata. En agosto Biden la escogió como su compañera de boleta. Biden y Harris derrotaron al entonces presidente Donald Trump y su compañero de fórmula y vicepresidente Mike Pence.
Fue así, como Kamala Harris se convirtió en la primera vicepresidenta de los Estados Unidos.
Candidata demócrata
Luego de la renuncia a la reelección, Joe Biden despejó el camino para que su vicepresidenta lo reemplazara en la boleta presidencial. Ya proclamada como candidata, los demócratas han visto reverdecer sus esperanzas de continuar en la Casa Blanca y mantener fuera del juego a Donald Trump. El carisma de Harris se manifestó en las cifras récord de recaudación a solo días del anuncio de que sería la candidata a la presidencia.
Las encuestas
Si bien al principio, las encuestas situaban a ambos candidatos empatados, con el correr de los días, la demócrata ha comenzado a despegarse de su rival republicano, y hoy, unos nueve sondeos le atribuyen una ligera ventaja a Harris sobre Trump. En la encuesta Reuters/ipsos la candidata oficialista supera 44 a 42 a su contendor, a pesar de que solo una semana antes estaban empatados. Aunque es una ligera ventaja y si se toma en cuenta el margen de error, podría decirse que se trata de un empate técnico. Pero lo cierto es que, en el sistema electoral estadounidense, las elecciones se ganan con los votos electorales que aporte cada estado.
La decisión
En este proceso electoral, serán los estados indecisos, conocidos como péndulos o bisagras, los que al final tendrán la última palabra y serán sus votos electorales los que darán la victoria a uno de los dos aspirantes.
