Por Federico Pinales
Los macos y las cacatas, Los hurones, las culebras y las ratas, cojean de las mismas patas.
Cada uno es igual de dañino y peligroso, actúan extremadamente sigilosos.
Muy parecidos a políticos, periodistas e intelectuales famosos, de esos que se juntan para conquistar a las masas y luego lanzarlas al pozo.
En el caso de los humanos son peores, porque después de desprestigiarse y “asquerosearse”, proyectando a los contrarios como los peores, luego por conveniencias circunstanciales, se juntan y se venden como los mejores.
Con esto no estoy descubriendo la “formula del agua tibia”, porque es una vieja práctica que se remonta hasta los tiempos más remotos.
En la República Dominicana es algo tan cotidiano, ideado, practicado y enseñado por los políticos e intelectuales más ancianos, que denunciarlo constituye un ejercicio en vano.
Lo vivimos en cada proceso eleccionario, para escoger las autoridades nacionales y locales, de partidos y organizaciones profesionales, sindicales y sociales sobre la base de que "en política se hace lo que conviene”.
Ese argumento lo esgrimen, en su “legítima defensa”, los descarados sinvergüenzas, cuando son cuestionados por los miembros de la prensa.
Por todo eso, la realidad apunta, a que Dios los cría y el Diablo los junta.
Felicito a los bobos que les llaman compañeros, a esos lobos carroñeros.
Eso es algo q se aprende desde los más viejos, recuerda q somos semejante a los animales, pero para ser mundo lamentablemente hay de todo por tal motivo hay q vivir cada cual a la defensiva