Lito Santana
Los efectos demoledores de la influenza avanzan por todo el territorio nacional. Naturalmente, no causará los estragos del COVID 19, que demolió gran parte de la población y secó los bolsillos de millones de dominicanos que debieron apelar a la caridad del Gobierno de entonces, que debió hacer exenciones, aplicar varias fases de sustento económico ala población y encerrar el país por varios meses.
Pero, aun así, la llamada plaga de la influenza, una gripe terrible que no solo bloquea los pulmones, sino que resquebraja todo el cuerpo, está atacando con furia a miles de hogares que se ven impotentes frente a este problema.
Sobre el avance de la influenza y la cantidad de afectados no se dan boletines ni cantidades de pruebas positivas, pues la mayoría de los enfermos se queda en su hogar bebiendo remedios caseros, pues las emergencias de clínicas privadas y hospitales públicos, están desbordados.
“Eso da asco”, mejor me quedo en mi casa curándome como pueda”, se oye decir por todos lados, porque total, no hay medicinas gratis y las recetas contra la influenza, igual que el COVID 19 en su tiempo, no aparecen y cuando se encuentran están por encima de las posibilidades económicas de la gente de abajo. Son escasas las familias que no tienen o han tenido uno de sus parientes en cama. Mientras tanto, la acción oficial no se siente.
Es la Sociedad Dominicana de Neumología y Cirugía del Tórax que emitió este lunes 01 de diciembre, un llamado de alerta a la población ante el incremento sostenido de infecciones virales respiratorias que se registra en el país, entre ellas influenza A y B,
Esta entidad advierte que en las últimas semanas se ha observado un aumento notable de cuadros febriles y gripales en adultos y niños, lo que ha provocado un incremento del ausentismo escolar y laboral.
El llamado es particularmente dirigido a personas con mayor riesgo de presentar cuadros graves ante infecciones respiratorias, como la influenza.
Mientras tanto, y no se sabe porqué motivos el gobierno, aceleró la llegada de la “Brisita Navideña”, un incentivo al consumo de comidas y bebidas que va a mejorarle la vida a más de dos millones de dominicanos.
Los medios oficiales de la Presidencia de la República lo reseñan así: “El presidente Luis Abinader anunció, una vez más, cómo los dominicanos y dominicanas sentirán “La Brisita Navideña” desde las instituciones públicas, a partir de este 29 de noviembre hasta el 5 de enero, para garantizar que cada familia dominicana disfrute de unas fiestas dignas y llenas de alegría”.
El jefe de Estado informó que, a través del programa Supérate se entregarán bonos digitales de RD 1,500, que impactarán a 1 millón 400,000 familias.
Asimismo, el Gabinete de Política Social entregará bonos en tarjeta física por igual monto, alcanzando 1 millón 200,000 personas. Estos bonos serán entregados el 4 de diciembre”.
Dicen que la influencia se beneficia del “friíto” de diciembre para atacar con más fuerza a niños y ancianos, de modo que esa “brisita navideña” puede ser cómplice de esta terrible enfermedad. Pero es obvio que vale más incentivar “unas fiestas dignas y llenas de alegría”, que salir a combatir la influenza que ya tiene fuerzas devastadoras.
