(A propósito del 60 aniversario del Banco Popular)
Por Osvaldo Santana
¿Qué tiene que ver Don Alejandro E. Grullón E. con la colegiación periodística? Es la pregunta obligada que cualquier lector debe hacerse al leer ese título.
Pero ese título encierra una historia que no ha sido bien contada ni siquiera a los propios periodistas. Mercedes Castillo, antigua presidenta del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), al expresar su pesar a la familia y al Banco Popular Dominicano por el fallecimiento del señor Grullón, el 16 de diciembre de 2020, recordó que había sido declarado “miembro honorario del CDP por su siempre colaboración institucional”.
Y así fue siempre, desde los primeros años del Sindicato Nacional de Periodistas Profesionales (SNPP), el Banco Popular, bajo la orientación del señor Grullón, fue un colaborador sistemático para el soporte de la mayoría de las actividades de esa organización, explica Castillo.
Pero la razón profunda de ese apoyo nadie la puede desentrañar si no conoce los motivos que movían a ese ciudadano en pro del desarrollo institucional de la sociedad.
Y solo él podía explicar los valores que motorizaban sus impulsos. Si se acude a una fuente primigenia, como el libro “Alejandro E. Grullón E. Discursos Escogidos”, que recoge las más importantes conferencias dictadas en el decurso de su vida, se puede comprender su pensamiento y sus obras. Sus motivos.
Grullón abogó por encarrilar la República por el sendero democrático. Para alcanzar ese propósito había que generar transformaciones institucionales, jurídicas y políticas, mediante cambios de ideas, pensamiento y actitudes de los dominicanos.
Con ese temperamento se convirtió en el propulsor de la Fundación Institucionalidad y Justicia, que vendría a jugar un importante papel en los procesos de reformas institucionales. Y pudo divisar que el futuro nacional estaba en las reformas que permitieran encarar los retos que conllevaría el “irreversible proceso de globalización de las relaciones comerciales internacionales”.
Sus ideas liberales y el humanismo que cargaba consigo lo indujeron a jugar un papel fundamental en la historia de la colegiación de los periodistas dominicanos.
Comenzaba la década de los 90, y el Colegio de Periodistas Dominicanos (CDP), creado por la ley 148-83 había caído en un período difuso, porque mediante recursos diferentes, la Sociedad Dominicana de Diarios (SDD) logró derogar dicha ley. Existía por la voluntad de sus miembros, pero sin un estatuto legal.
David Lorenzo, en su “Breve Historia del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), describe ese momento de este modo:
“A pesar de estar jurídicamente muerto, el CDP siguió operando en forma moribunda. El 10 de agosto del 1990 ganó la presidencia del gremio Rafael Méndez, quien de inmediato se acercó al presidente de la SDD, Rogelio Pellerano, con la mediación del presidente del Grupo Financiero Popular, Alejandro Grullón y el periodista Alex Jiménez, quien era en esa época presidente del Instituto de Previsión y Protección del Periodista (IPPP).” Quizás sería prudente señalar que para la época el timón de la SDD estaba en manos de Aníbal de Castro, entonces director de Última Hora.
La directiva del débil CDP había decidido romper el hielo. Fue convocada una asamblea para decidir la política de negociación. A finales de 1990 esa directiva designó una comisión integrada por Méndez, Osvaldo Santana, Wilson Suazo y José Bujosa Mieses”.
Sobre el desarrollo de las negociaciones, Lorenzo dice, además: “En enero del 1991 se iniciaron las reuniones formales. En algunas de ellas estuvo a punto de romperse el diálogo. En abril del 1991 se llegó a un acuerdo que permitió someter al Congreso del nuevo proyecto de Ley del CDP. El Congreso lo aprobó el 24 de abril. El 7 de mayo el presidente Joaquín Balaguer la promulgó con el número 10-91, que es la que actualmente tenemos”.
¿Qué fue realmente lo que hizo posible que las negociaciones dieran fruto y que se limaran las diferencias?
Fue el papel protagónico, más que de mediación, llevado a cabo por Alejandro E. Grullón E., quien tenía una relación muy primaria con el señor Emilio Ornes Coiscou, entonces director y propietario del periódico El Caribe. Su amistad con Ornes Coiscou hizo posible que se iniciara el diálogo y se alcanzara un acuerdo.
Según informaciones confiables, Grullón no terminaba de entender por qué los empresarios de la comunicación no toleraban que los periodistas se organizaran en un colegio. Y se dispuso a ayudar a resolver el conflicto que conducía a unos debates desconcertantes y muy ácidos entre los propietarios de medios y los periodistas que aspiraban a una colegiación.
El grupo Listín, en la época en manos de la familia Pellerano, y la propia SDD, no compartía el mismo nivel de hostilidad a la colegiación que el señor Ornes Coiscou; y Corripio, del grupo Hoy, tampoco ejercía una oposición tan obtusa.
Entonces, además de patrocinar el diálogo, cada vez que ocurría un impasse en las negociaciones, ahí estaba el señor Grullón, que lograba de cualquier manera persuadir a Ornes Coiscou, quien al término de los acuerdos asumió una actitud moderada, y se puede decir, amigable, hacia los negociadores del CDP.
Después de la ley 10-91
Es importante consignar, que ya aprobada la ley 10-91, el Banco Popular asumió un rol de acompañamiento del CDP, por instrucciones directas del señor Grullón, con el propósito de establecer normas y procedimientos internos. Y en efecto, asignó a una persona, Elio Olivero, que fue asimilado como gerente administrativo, clave para los primeros años de la nueva organización.
En los años sucesivos, ahí estuvo la mano amiga, explica Mercedes Castillo, del señor Grullón, no solo para los asuntos instituciones del Colegio, sino incluso, en la asistencia humanitaria de varios de sus miembros en circunstancias difíciles.
DON ALEJANDRO GRULLÓN
Alejandro E. Grullón E., fundador y primer presidente del Banco Popular Dominicano y del Grupo Popular, y presidente Ad Vitam y Consejero Emérito de Grupo Popular y del Banco Popular, fue uno de los hombres de estos tiempos que más ha contribuido con el avance económico, social e institucional de la República tras el derrocamiento de la tiranía de Trujillo. Falleció el 16 de diciembre del año 2020.
Excelente , mi estimado Osvaldo. Así fue. Ha contado bien parte de la historia de la colegiación periodística dominicana. Mercedes Castillo.