Por Federico Pinales
Los veo y no lo creo, el contenido de los videos, que se publican sin rodeo, dentro del programa “Apogeo”.
Son denuncias muy delicadas, hechas con gran responsabilidad, que deben ser investigadas y respaldadas por la máxima autoridad, porque están denunciando y sacando a la claridad, la parte más oscura de la delincuencia y la criminalidad.
Según las denuncias y los videos presentados, nunca desmentidos ni negados y al parecer tampoco investigados; dejan muy mal parados a algunos organismos del Estado, que, al parecer, a estas graves denuncias ninguna atención han prestado.
Escuchar de boca de ex policías de diferentes rangos, de “ex-delincuentes”, de “traficantes y sicarios” activos, confesando sus crímenes e involucrando a altos rangos policiales, como los “patrocinadores y protectores” de tantos horrores, no solo provoca indignación y temores; hace que cualquiera sienta hasta temblores.
Los productores del programa “Apogeo”, a quienes con frecuencia veo, por lo arriesgado de sus videos, no te andan con rodeos y a la Policía no le quitan el “deo”, evidenciando el viejo estilo de “traqueteo”, de importantes departamentos de esa institución, que en lugar de proteger a la población, se enriquecen en base a la criminalidad y la corrupción, sin recibir una ejemplar sanción.
Según lo que observo y veo, el gobierno debe poner especial atención al trabajo de los jóvenes del programa Apogeo y evitar que a ellos les pase algo trágico y feo.
Esos muchachos están enfrentando a osos muy peligrosos, que por su interés a cualquiera le limpian el “boso “.





