Por Octavio Santos
En la República Dominicana, la lucha contra el analfabetismo ha sido una prioridad en las políticas públicas. Programas como "Supérate" y "Quisqueya Aprende Contigo" fueron implementados con el objetivo de erradicar esta problemática, especialmente entre las poblaciones más vulnerables. Sin embargo, a pesar de las inversiones y esfuerzos realizados, los resultados han sido limitados, evidenciando desafíos estructurales y de implementación.
"Supérate"
El programa "Supérate" fue concebido por la administración del presidente Luis Abinader como una iniciativa gubernamental destinada a erradicar la pobreza y promover la inclusión social. Entre sus componentes se encuentran la formación económica, la intermediación laboral y la mentoría para el desarrollo de emprendimientos productivos formales. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, los resultados en términos de alfabetización han sido limitados. Según datos del Sistema Único de Beneficiarios (SIUBEN), la tasa de analfabetismo entre los jefes de hogares más pobres del país se ha mantenido prácticamente estancada. En 2012, esta tasa era del 15.3%, y para 2021, apenas había descendido al 12.83%.
Este estancamiento es especialmente preocupante dado que los jefes de hogar desempeñan un papel crucial en la educación y el bienestar de sus familias. Su falta de habilidades básicas de lectura y escritura limita su capacidad para acceder a mejores oportunidades laborales y para apoyar la educación de los niños, perpetuando así el ciclo de la pobreza.
"Quisqueya Aprende Contigo”
El Plan Nacional de Alfabetización "Quisqueya Aprende Contigo" (QAC), lanzado en 2012, representó una ambiciosa iniciativa del Estado dominicano para erradicar el analfabetismo entre jóvenes y adultos mayores de 15 años. Con una meta inicial de reducir la tasa de analfabetismo en un 6.6% en dos años, el plan buscaba no solo enseñar a leer y escribir, sino también promover la inclusión social y ciudadana a través de la educación.
Durante sus primeros años, QAC logró avances significativos. Según informes oficiales, desde su inicio hasta 2019, el programa impactó a más de 800,000 personas, de las cuales una parte significativa completó su proceso de alfabetización. Este esfuerzo redujo la tasa nacional de analfabetismo del 13% en 2012 al 5.5% en 2019.
Sin embargo, en los años recientes, el programa caído prácticamente en un estancamiento. Entre 2020 y 2022, se alfabetizaron solo 6,622 personas, a un costo total de RD$1,845 millones, lo que representa un aumento considerable en el costo por persona alfabetizada. Además, la tasa de analfabetismo ha mostrado un ligero repunte, situándose en un 6.5% en 2024.