Por Evelyn Irizarri Santos
NUEV YORK, Estados Unidos. – Desde que se produjo la primera reunión entre el entonces presidente electo Donald Trump y el alcalde de Nueva York, Erick Adams, comenzaron las especulaciones sobre la posibilidad de que, al asumir, Trump influiría para que el Departamento de Justicia desestimara los cargos por corrupción que pesan sobre el funcionario.
Ese temor se convirtió en certeza esta semana, pero ¿qué hay detrás de desestimar los cargos contra Adams?
Lo confirmó
Si bien los indicadores mostraban de manera clara que se estaba en ese ánimo, las declaraciones de Trump lo confirmaron. Trump dijo que no descartaba la posibilidad de desestimar los cargos en contra de Adams, por entender que los mismos no tenían fundamento, además de hacer similitudes entre las motivaciones de acusaciones contra él y contra Adams.
Allanó el terreno
Desde que Adams comenzó a mostrar público respaldo al plan de deportación masiva de la administración Trump, los neoyorquinos comenzaron a sospechar que algo había detrás de ese cambio radical del alcalde frente al tema migratorio, y desató las alarmas, en especial entre los indocumentados y sus familiares, pues de ser un protector se transformó en un detractor.
Perplejos, los residentes de la Gran Manzana contemplaban cómo el funcionario se colocó del lado de los antiinmigrantes.
Fue más lejos
El alcalde se fue tan lejos en su posición, que llegó a insinuar que, de ser necesario, facilitaría la eliminación de las condiciones de Estado Santuario de la ciudad de Nueva York. Adams también criticó a la administración Biden-Harris, por el caos en la frontera y el abandono de la ciudad.
La misma actitud asumió tras reunirse con el llamado zar de la frontera Tom Homan, a quien ofreció toda la colaboración para ejecutar las deportaciones.
Cierre de albergues
No pasó mucho tiempo después de las reuniones con el presidente Trump y con el zar de la frontera Tom Homan. El alcalde dispuso el cierre de varios albergues y detuvo el ingreso de nuevos refugiados en los que aún estaban abiertos.
Una tormenta
Tras darse a conocer que el Departamento de Justicia había desestimado los cargos en contra del alcalde, se desató una verdadera tormenta política en la ciudad.
Los concejales, tanto demócratas como republicanos aseguran que el alcalde había colocado sus intereses personales por encima de los de la ciudad y de los inmigrantes a quienes la ciudad de Nueva York está llamada a proteger, dada su condición de ciudad santuario.
Los concejales están molestos y dicen que es el resultado de sus constantes viajes a Washington, en alusión de que buscó el apoyo del presidente Trump y que el perdón obedece a un acuerdo entre ambos políticos.
Aunque era un secreto a voces, que en cualquier momento se haría este anuncio, los defensores de los derechos de los inmigrantes no han escondido su malestar, pues están seguros que con esta decisión Adams terminará por dejar a su suerte a los indocumentados y que otorgará todas las facilidades para que los agentes de ICE, cumplan con el plan de deportación de la nueva administración.
Niega los cargos
"Nunca he violado la ley y nunca lo haré", fue lo que expresó Adams tras conocer la instancia del Departamento de Justicia de desestimar los cargos, sin perjuicios, de corrupción en su contra.
Pero ¿qué quiere decir el término "Sin perjuicios"? Esto quiere decir que en el futuro, el gobierno federal puede volver a abrir el caso cuando lo crea necesario, pero hay quienes piensan que se trata de un tiempo de prueba para comprobar que Adams cumpla con lo que supuestamente habría prometido hacer a cambio del perdón.
Esta decisión se produce después de meses de especulaciones sobre si el Departamento de Justicia de Trump tomaría medidas para poner fin al caso penal contra Adams.
El alcalde fue acusado de aceptar sobornos para viajes gratuitos o con descuento y contribuciones ilegales a la campaña.