Por Santo Salvador Cuevas
La provincia Bahoruco está representada ante el Congreso Nacional, por dos diputados y un senador.
Ellos representan a la globalidad ciudadana de Bahoruco.
Siendo así las cosas, y siendo justo, y siendo Tamayo el segundo municipio en importancia numérica y productiva, entonces, por justicia a Tamayo le debe tocar un representante en el Congreso Nacional.
Pero eso no se regala, sino que va a depender de la conciencia del tamayero, a quien le toca decidir con su voto.
Si eso no se entiende, y nos atrincheramos como pueblo por encima de los colores y banderas, entonces, podríamos tener como resultado una situación lamentable, viendo a Neiba alzarse con los dos diputados y el senador.
Cuando Cristóbal Colón ocupó la isla, empezaron a engañar a los nativos cambiando espejitos por oro; Colón y los suyos llegaron en carabelas; ahora vienen a Tamayo en grandes y muchas jepetas, no traen espejitos por oro; estos se acercan con muchos pesitos para cambiarlos por votos.
Cristóbal Colón encontró entre los indios a los traidores como Guacanagarix que se vendió a los conquistadores.
Ahora los nuevos Guacanagarix, también traicionan buscándoles votos a los candidatos extraños en detrimento del candidato nuestro.
Son dos diputados los que tocan a Bahoruco, que se lleven uno.
Pero en Tamayo tenemos derecho a un diputado que nos represente en el Congreso Nacional: ese es Rafael Cuevas.
A votar en masa por Rafael Cuevas Diputado; Marino Feliz Senador; Abel Martínez Presidente.
Tamayeros, nos merecemos un diputado, tu voto decide.